viernes, 5 de abril de 2013

Capítulo nueve. ¿Quién dijo que esto era fácil?

Encontrar las aulas en un castillo tan grande, es una prueba difícil de superar si no tenías sentido se la orientación.
Papá solía llevarme de excursión al bosque y con ello había practicado con mi memoria a la hora de ir por caminos.
La única diferencia es que los caminos nunca cambiaban... Hogwarts sí.
Había puertas falsas, escaleras sin ningún final, largos pasillos que desembocaban a un callejón sin salida o a un cuadro con un huraño inquilino.
Estatuas que cambiaban de lugar. El movimiento de unos cuadros a otros de los personajes no ayudaba tampoco mucho.... Y con Peeves, el maldito poltergeist del colegio, era aún mas difícil encontrar un camino.
Además de dedicarse a colocar mas trampas que las que ya había en el colegio, Peeves, se dedicaba a gastar bromas a los de primero llevandoles por sitios que no debíamos.
En mi caso, al ir al aula de transformaciones el primer día, acabó llevándome a Cloe, a Nina, a Bonnie a Eric, a unos chicos mas y a mi, a la sala de profesores.
Nos echaron la bronca, hasta que vieron que el condenado poltergeist e estaba muriendo de risa sobre nosotros.
Tras aquello, nos llevaron en dirección a nuestra clase correspondiente
Las clases eran sin duda increíbles. A pesar del gran esfuerzo que pedían la mayoría de ellas.
Aunque sin duda, mis favoritas fueron, Encantamientos y Defensa Contra Las Artes Oscuras. La profesora Silver era extremadamente dulce, como demostró el día de la selección.
Sus clases eran divertidas y era imposible no echarse a reír al ver a la fina profesora Silver, danzar de un lado a otro del aula.
Como habría dicho mi madre en uno de sus momentos cursis, era un alma libre y espiritual.
En verdad no me sorprenderia que algún día confesara que es una ninfa del bosque. Aunque muy probablemente, las ninfas reales eran muy diferentes a las ninfas de los cuentos de hadas muggles.
La clase de Defensa Contra Las Artes Oscuras (a diferencia de la clase de Encantamientos que se hallaba bajo el pasillo de Encantamientos del tercer piso) el aula de Defensa estaba en la primera planta, en una de las aulas escondidas tras las grandes escaleras príncipales del vestíbulo.
El profesor Matthew Doge era un hombre serio y curioso que no vi en la selección o en la cena de comienzo de curso.
Al entrar en clase, supe porque.
Estábamos todos sentados, esperando a que llegara el profesor.
Había un murmullo de curiosidad generalizado ya que nadie sabía mucho de el, sólo que sobrevivió al ataque de unos mortifagos (Los secuaces de Lord Voldemort, el mago más tenebrosos de todos los tiempos) y que luchó en la batalla más sangrienta que Hogwarts a visto.
Era considerado algo así como un héroe. Había visto pocos héroes en mi vida y a mi padre, que trabajaba en el ejército, le consideraba como uno. Pero realmente nunca había visto a alguien considerado un héroe oficialmente.
Escuchamos un extraño chirrido fuera del aula y nos volvimos todos con curiosidad antes de que entrara.
Estaba en segunda fila, así que lo primero que vi fue un rostro de mejillas altas, nariz recta, ojos negros y cabello castaño alborotado.
Como ya había dicho, tenía aspecto de ser serio y duro. Como sus rasgos demostraban.
Lo más terrorifico de todo, era una larga cicatriz que cruzaba desde Su mejilla izquierda, cruzando Su nariz hasta la comisura derecha del labio inferior.
Daba miedo, mucho miedo.
Pero era demasiado pequeño.
El chirrido extraño le acompañaba mientras se deslizaba por el pasillo central hasta el escritorio.
Entonces comprendí el porque de Su pequeña estatura.
Estaba en una silla, en una con ruedas que se deslizaban sobre el suelo de piedra evitando los baches o más bien sobrevolandolos.
Le faltaba una pierna al completo, la izquierda y la otra acababa en un muñon a la altura de la rodilla.
¿Porque...? ¿Porque los médicos no le habían ayudado con magia a volver ha andar? Sabía que la magia médica era capaz de hacer crecer cualquier tipo de zona de cuerpo o incluso podía ir con algunas piernas mágicas ¿no?
Trate de no estremecerme o mirar con asco o repulsion Su pierna.
La puerta se cerro de golpe con una sacudida de la mano.
Pegamos un respingo y el profesor Doge giro Su silla... Bueno, más bien la silla giro sola, para ponerse frente a toda la clase.
Vale, ya no resultaba tan pequeño. Ahora daba miedo e imponía mucho, mucho respeto.
Nos miro rápidamente, englobando a toda la clase con sus ojos negros.
Sonrio a medias, no fue una sonrisa de alegría. Fue una de burla y sorpresa.
  -Demasiado entusiasmados os veo, queridos alumnos de primero-Dijo con una voz grave aunque relajante.
Su dura mirada se clavo ahora con más fiereza en nosotros,perforandonos con ella.
  -Defensa Contra Las Artes Oscuras es una asignatura muy importante, una de las más importantes que se imparten en Hogwarts. En ella, se os enseña a identificar y tratar con magia tenebrosa, como el propio nombre de la asignatura indica. En está clase también conocereis hechizos defensivos y de ataque, además de criaturas tenebrosas de todo tipo-Hizo una pequeña pausa y volvió a sonreír de aquella manera siniestra-Por supuesto, esto no supone que el estudio constante o el aprendizaje de hechizos os asegure tener buena nota. Hay alumnos que valen y otros que no... El número de los que valen va descendiendo cada año porque os sentis demasiado seguros y os engañais pensando que no necesitareis aprender defensa de hechizos o maleficios ya que os han engañado diciendo que todo está bien-Endurecio el rostro-Nunca os confieis, no dejeis de lado mi asignatura y aprovecharla. Un mago no es un mago sí no sabe defenderse a si mismo y a los que quieren. Este es el objetivo real de la asignatura. No se os pide que derroteis a un ser tenebrosos muy peligroso ni nada de eso, sólo que sepais proteger Lo que merece la pena... ¿Preguntas?
Nos miramos los unos a los otros sin saber muy bien que decir y más sorprendidos que nunca con sus palabras.
Nadie levanto la mano, nadie hablo, nadie se atrevía a cuestionarse nada de Lo que el profesor Doge dijera.
La mano de Eric se levanto de repente con firmeza. Observé boquiabierta Su brazo.
El profesor Doge miro sorprendido la mano alzada y luego el rostro de Eric. Sonrio algo más amable.
  -Royden ¿me equivoco?-Dijo alzando la barbilla.
Eric asintio con la cabeza.
  -Así es señor-dijo y alzó un poco Su voz para hablar-¿De verdad cree usted que es posible que las fuerzas oscuras se vuelvan a alzar?-Pregunto.
El profesor Doge le observó pensativo.
  - ¿Lo preguntas por el alto nivel al cual pienso someteros?-Pregunto.
Eric sonrio y negó con la cabeza.
  -No, hablo a nivel personal-Contestó.
El profesor Doge se quedó pensativo un largo minuto.
  -Por supuesto. La magia oscura siempre acaba alzandose una y otra vez. Es una vieja amiga avariciosa de poder. Mientras haya bien, habrá mal-contestó.
  -Equilibrio-dije sin darme cuenta y provocando que la clase entera me mirará.
Me puse roja como un tomate y mucho más cuando la mirada del profesor me perforo provocandome escalofrios.
Su silla se movió un poco para poder mirarme mejor.
  -He de confesar que no conozco Su nombre. Por Lo cual me supongo que es hija de muggles-dijo.
Me sentí algo dolida.
Alcé la barbilla y trate de ignorar mi sonrojo.
  -Clarie Wolf-dije con voz temblorosa.
El profesor Doge asintio con la cabeza.
  -Está bien, señorita Wolf. Equilibrio, así es. Hay un pequeño apartado al final de vuestros libros en el cual define que Lo que vosotros vais a estudiar estos cursos es el equilibrio entre la llamada magia defensiva y magia negra. ¿Verdad señorita Wolf?-Me especto.
Asentí sonrojada con la cabeza
  -Me supongo que por curiosidad a debido estudiarse el libro de arriba a abajo ¿me equivoco?-Me pregunto.
Me sonroje un poco más.
  -La verdad es que me Lo leí... Una vez-contesté con boca chica.
  -¡Oh! entonces si te pregunto por algún tipo de criatura nocturna que sólo sale en luna llena...
  -Los muggles también tenemos historias de hombres lobo, profesor Doge-dije con una pequeña sonrisa.
Alzó las cejas con sorpresa.
  - ¿Y los muggles conocen también algún ser que se alimente de sangre y repela el ajo?-Me pregunto.
No pude evitar sonreír un poco más.
  -Los vampiros, por supuesto nada de esto es real para ellos-contesté.
Fruncio el ceño ligeramente y luego sonrio con algo de malicia.
  -Está bien, conoces sin ninguna duda los seres oscuros que son conocidos en ambos mundos pero...¿te atreverias con algún ser algo más difícil? O alguna maldición, para demostrar que as leído el libro y que tienes al menos, algo de interes sobre está asignatura. Por supuesto, dudo mucho que el hecho de devorar libros suponga que esta asignatura os resulte fácil. Esto no es Historia de la Magia. Aquí necesitais un nivel práctico por encima del estudio continuo.... Es más, creo que debería preguntaros a todos, para conocer el vago nivel que debeis llevar-Sonrio un poco más y se retiro hacia el escritorio.
Todos estaban nerviosos y espectantes. Esperaba que no me odiaran por aquella ronda de preguntas inesperada.
  -Si conoceis la respuesta, alzad la mano. Recibireis puntos por vuestros aciertos, aunque no os quitare por vuestros fallos ¿entendido? Espero que respondais todos-Dijo.
Cloe me pincho el costado y la mire de reojo.
  -Da miedo-me Susurro.
Me encogi de hombros y Sonrei.
  -A mi me gusta-dije.
El profesor Doge se quedó un segundo callado y pensando una buena pregunta.
  -Maldición o maleficio ¿Cual es la más poderosa y porque?
La clase de quedó en total silencio mientras se miraban los unos a los otros.
Estupendo, me sabia la respuesta. Pero no quería decirla. No queria ser la empollona. En la escuela muggle era la rara, aqui podía empezar se cero, ser diferente. Podía hacerme a un lado, ser normal y tener mi pequeño grupo de amigos sin llamar la atencion y...
  - ¿Señorita Wolf? ¿Tiene algo que decir?-Pregunto el profesor Doge.
Pegué un respingo y observé sus oscuros ojos que me observaban habidamente, como un águila rapaz.
Aprete los dientes y me hundi en mo asiento con un suspiro.
  -Un maleficio es un hechizo realizado para provocar daño u otros efectos negativos. Es similar a la maldicion, pero no es tan poderosa o no se realiza con la misma mala intención que una maldición, que suele ser empleada con intenciones tenebrosas-dije alzando un poco la voz mientras sentía cuarenta ojos en mi nuca.
Todos los Gryffindor más todos los Hufflepuff.
¿Había estado alguna vez tan roja? Lo dudaba, ni síquiera en la selección.
El profesor Doge me observó con ojos entrecerrados, hasta que me sonrio.
  -Magnífico, cinco puntos para Gryffindor. Estoy orgulloso de mi casa-Dijo con una amable sonrisa.
Mire rápidamente a Cloe con la boca abierta.
¿El era nuestro...? ¿De verdad?
Mire al resto de Gryffindor y me di cuenta que ninguno tenía ni idea. Pude ver la sorpresa e incluso la mofa en Hufflepuff al darse cuenta de este echo. Seguro que ellos ya sabían quién era el profesor representante de sus casas.... Bueno, la profesora Silver. Al igual que el profesor silencioso y estremecedor de Transformaciones era el de Slytherin y el de Pociones de Revenclaw.
  -Está bien Hufflepuff, ya podéis poneros las pilas. Está pregunta es para vosotros. Definirme hechizo.
Al acabar la clase, Gryffindor tenia veinte puntos más y Hufflepuff quince.
Contesté una pregunta más del profesor Doge, pero Eric y Sam Wittman contestaron otras dos.
Cuando salí por la puerta estaba orgullosa de mi misma y mucho más cuando mis compañeros me dieron la enhorabuena.
Bueno, resulta que leerme los libros del colegio este verano no había sido tan mala idea después de todo.
Ojalá todos los profesores fueran como el profesor Doge.
Pero por supuesto, eso era difícil.
El profesor Guthbert Binns, era el profesor de Historia de Magia.
Una de las clases más pesadas, aburridas y eternas, impartidas en está escuela. El profesor, era el único fantasma que impartia clase. Antes de morir también era profesor de aquella asignatura. Un buen día se levanto y dejó Su cuerpo atrás mientras impartia clase a sus sorprendidos alumnos.
Era aburrido y monotono al hablar mientras nosotros tomábamos notas de todo Lo que decía con Su voz pausada y pesada.
Necesitabas toda tú voluntad para no quedarse dormido en Su clase.
Más de una vez tuve que despertar a Eric de un codazo y menear a la embobada Cloe durante sus lecciones.
Sin duda, Hogwarts tuvo algo de suerte con este aplicado profesor que amaba aquella aburrida y eterna asignatura que debía impartir ahora año tras año hasta el fin de los tiempos. No tendrían que pagarle ni buscar otro profesor porque...¿Que iba ha hacer con el dinero? ¿Que iba ha hacer sin Su trabajo? ¡Oh, sí! Matarnos de aburrimiento.
Pociones, no resultaba tan aburrida, pero se llevaba la palma también.
El profesor Terry Boot era un profesor que tendría en torno a los cincuenta años. No era ni alto no bajo, con algo de barba, cara de ratón, ojos saltones y marrones con el pelo negro. Aunque su barba era de un extraño color rojizo.
Era amable, aunque demasiado enchufado a Revenclaw, con los cuales compartíamos aquella clase.
Aún así, pronto todos nos dimos cuenta de Lo difícil que era hacer pociones.
Puede que la palabra difícil no fuera la indicada... Pero sí necesitabas toda tú concentración al realizar una pocion.
Por ello, nadie consiguió muy grandes logros en la pocion para curar forunculos.
Aunque Cloe y yo tuvimos la suerte de realizar una pocion Lo bastante decente para recibir un punto para la casa. Revenclaw consiguió dos.
Odiaba el favoritismo.
Y el primer día de Transformaciónes esperaba que fuera igual el profesor, sobretodo teniendo en cuenta que estábamos en la clase con Slytherin y el profesor era jefe de la casa de Slytherin también.
Chamberlain Armen, era un hombre alto y muy delgado, con el cabello rubio y liso recogido en una coleta a la altura de la nuca.
Sus facciones eran rectas y bonitas, con labios finos, ojos grandes de color azul oscuro y dientes perfectos.
Los suspiros de las Gryffindor y las Slytherin, no fueron disimulados.
Era atractivo, a pesar de que era muy alto, casi que no entraba por la puerta.
Mediria los dos metros sin ninguna dificultad.
  -Transformaciones-Dijo sentandose sobre el pupitre que enfrentaba a los de los alumnos. Cruzó sus brazos y los tobillos-Es una asignatura muy muy complicada. Consiste en transfigurar un objeto en otro, conjurar o hacer desaparecer objetos o modificar la naturaleza fundamental de un objeto. O eso dice la teoría de vuestros libros de 'Guía de transformación para principiantes'
Mostró sus perfectos dientes blancos que volvió locas a algunas alumnas. Sin duda, era muy muy guapo.
  -Pero claro, eso es sólo lo que dice la teoría-se levanto y comenzó a pasearse por la clase-Para mi, el arte de la Transformación es algo mucho más haya que esa simple definición-Alzo la varita y con una simple sacudida transformó una silla el un precioso cervatillo.
El profesor Armen fue hacia el y le acaricio las orejas. Las chicas y algunos chicos observamos atontados aquel bonito e inocente animal.
  -Supone un gran esfuerzo, muchas práctica y una gran determinación el hecho de cambiar una cosa por otra, hacer aparecer o desaparecer de la nada algo, etcétera-dijo y volví a transformar el cervatillo en silla para disgusto de todos-Se que el profesor Doge, entre otros, pero sobretodo el, os han dicho la importancia de sus asignaturas. Pero en mi opinión, dominar está materia es algo muy difícil y en Lo cual debereis aplicaros sí queréis aprobar-dijo mientras volvían al escritorio. Entonces miro a los Slytherin-Sois mi casa y aunque muchos debeis de esperar un trato mejor, no os Lo daré. Debeis demostrar Lo que valeis y no vais a llevaros méritos sin ningún esfuerzo-Entonces se volvió hacia nosotros-Para vosotros, más de Lo mismo. Esfuerzo y dedicación-Entonces nos miro alternativamente-la rivalidad entre estas dos casas a sido eterna, pero agradecería un poco de paz por parte de ustedes y que seais un ejemplo de como las riñas tontas entre casas no suponen problema para crear lazos de amistad.
Los Slytherin nos miraron con un gran asco, al que la mitad les respondieron, sobretodo Eric. Odiaba a aquella casa, era algo que no tenía ni pies ni cabeza para mi gusto.
Mientras a mi no me hicieran nada, estaba bien con ellos.
El primer trabajo supuso transformar una cerilla en una aguja.
Nos sorprendió la simpleza de la transformación. Pero al realizar el hechizo una y otra vez sin conseguí nada, nos dimos cuenta de Lo difícil que realmente era aquella asignatura.
El profesor Armen controlo nuestros trabajos y se detuvo en una solitaria chica de Slytherin al fondo de la clase que reconocí como Jera Lestrange.
Está estaba alejada de Su curso y el nuestro. No estaba segura de sí era por ella misma o porque la habían repudiado ya.
El profesor Armen se agacho a Su lado y comenzo a conversar con ella en susurros.
Jera asentia con la cabeza sonrojada de vez en cuando mientras el profesor Armen era dulce y amable con ella. O eso me pareció.
Acabó la conversación acariciando Su cabeza con disimulo y al girarse capturo mi mirada.
Fruncio ligeramente el ceño y avanzó hacia mi mientras la mirada de Jera se clavaba, algo confusa, en mi.
  - Señorita Wolf ¿Ha conseguido algún progreso?-Pregunto el profesor Armen con voz amable y dulce.
Asentí algo sonrojada ahora con la cabeza y señale mi aguja.
El profesor Armen la cogió entre sus dedos y la observó con curiosidad.
  -Vaya, vaya, se ha vuelto puntiaguda y plateada. Pero sigue pareciendo una cerilla. Aún así, es el un grandísimo logró-Me felicito con una pequeña sonrisa-un punto para Gryffindor.
Dejó la cerilla y se alejo al centro de la clase mientras mi curso me felicitaba y Slytherin me miraba con odio.
Al acabar la clase un corto tiempo después, había sido la única que habia progresado algo.
Al salir de la clase, Eric estaba algo molesto ya que el no había conseguido cambio alguno en Su cerilla.
  -Podrías ayudarme ¿no crees? Darme algunas clases o algo así. Como mis padres sepan que soy tan malo se avergonzaran de mi-dijo Eric golpeando mi hombro.
Aunque sabia que Lo decía el broma.
Abrí la boca para decirle que estaría encantada de ayudarle, pero me interrumpieron.
  - ¿En serio Royden? ¿Clases se una sangre sucia? Sí que ha caído bajo tú familia-dijo una voz estridente a nuestras espadas.
Nos giramos y contemplamos al gran grupo de Slytherin que se había detenido tras salir de Transformaciones. Había un grupo sobresaliendo en ellos. Eran cuatro.
  - ¿Que le has llamado Rosier?-Gruño Eric colocandose frente a mi.
Cloe parecía muy ofendida y me miraba con compasión.
¿Porque me miraba asi? ¿Por aquellas palabras?
Un muchacho de cabello negro, ojos azul gastado y rostro pálido avanzó con una gran sonrisa y tres chicos siguiendole.
  -La he llamado sangre sucia, que es Lo que es-Dijo Emerik Rosier con arrogancia.
Eric, Ian Flume, Sam Wittman, Jamie Jones y William Zeller (compañeros de cuarto de Eric) se pusieron frente a mi y avanzaron un poco más.
  -Repitelo una vez más, asqueroso Slytherin-dijo Eric entre dientes.
¡Oh, oh!
Aparte a los chicos y me puse junto a Eric.
  -Eric, déjalo. No importa, no me a molestado que...-comencé.
  - ¿Acaso sabes el insulto que es Lo que te acaba de decir?-Me especto y miro a Rosier con asco-Es algo que se usaba durante los tiempos oscuros para definir a magos y brujas mestizos o hijos de muggles como sí fueran basura. Cuando no es así.
Estaba muy alterado, demasiado para ser una tontería tan grande.
  -Eric ¿tú ves que me importe? Me da igual Lo que digan de mi o Lo que...-comencé de nuevo tratando de hacerle entrar en razón.
Sus ojos plateados chispearon.
  -Pues a mi no-gruño y sacó Su varita.
Los matones de Rosier, Owenn Gibbon, grande como una casa y estúpido como el solo, Neel Carrow, cara de rata, chata y fea, de baja estatura pero gran curpulencia y Adrián Bole, alto y delgado, con el cabello rubio alborotado y barbilla demasiado cuadrada y dura, sacaron las varitas también.
Era extraño, ya que les veía más peleando con los puños que con las varitas.
Los amigos de Eric sacaron las varitas también.
Me estremeci al ver tantas varitas a mi alrededor.
Me lleve la mano al bolsillo para sacar la mía mientras Nuts salía de Su escondite y se enrrollaba en mi cuello haciendo ruidos molestos hacia Rosier.
  -¡Parad!-dijo una voz asustada, debil y dulce.
Todos dudamos y miramos al origen se aquel grito.

4 comentarios:

  1. OMG me encanta, me estoy leyendo HP y el caliz de fuego, y cuando leo tu novela parece que vivo en el futuro magico, pero a la vez en la epoca de Harry Potter, deseo con muchas ganas el siguiente, en serio,estoy constantenente entrando en tu blog para ver si has subido capitulo, me tienes enganchadisima akdhajshakd y amodoro tu forma de escribir, creas un ambiente muy magico.

    ResponderEliminar
  2. Mil gracias por tu comentario!! Me encanta que te encante y mil gracias. He sacado tiempo de donde e podido para escribir esto sólo para ti. Te Lo dedicó y mil gracias ^.^

    ResponderEliminar
  3. Mil gracias por tu comentario!! Me encanta que te encante y mil gracias. He sacado tiempo de donde e podido para escribir esto sólo para ti. Te Lo dedicó y mil gracias ^.^

    ResponderEliminar
  4. ¿Quieres que recomiende tu blog por twitter o algo? (soy @gotourdreams) Afjkdslfjlds porque seguro que si lo lee más gente tendrás a muchos más enganchados seguro :3 Awwww,me gusta mucho en serio, mil gracias de vuelta.

    ResponderEliminar